Resulta extraño que un acuerdo que se firmó en 1999 unánimemente por todos los países de la UE y al que actualmente están adheridos 46 países (comunitarios y no comunitarios) pueda despertar tanta polémica en el presente año (casi una década después), y lo más curioso es que los principales argumentos que se usan en las movilizaciones no aparecen en ningún texto oficial.
El Espacio Europeo de Educación Superior (EEES), cuyo inicio se firmó en la ciudad italiana de Bolonia (de ahí recibe su nombre), es un paso más en la convergencia económica, política y social de Europa que tiene como objetivo una mejora de la calidad y de la competitividad de nuestra formación universitaria, que se trasladará a un mayor fortalecimiento de nuestro tejido productivo y su consecuente impacto en la mejora del bienestar de los ciudadanos.
El Espacio Europeo de Educación Superior (EEES), cuyo inicio se firmó en la ciudad italiana de Bolonia (de ahí recibe su nombre), es un paso más en la convergencia económica, política y social de Europa que tiene como objetivo una mejora de la calidad y de la competitividad de nuestra formación universitaria, que se trasladará a un mayor fortalecimiento de nuestro tejido productivo y su consecuente impacto en la mejora del bienestar de los ciudadanos.
La declaración de Bolonia pretende pasar de un modelo formativo tradicional, basado en las clases magistrales y los exámenes finales, a una enseñanza donde el alumno es el centro del proceso, tendrá una evaluación continua en las que confluirán clases magistrales, trabajos de campo individuales, interacción con la realidad más cercana, búsqueda de información y bibliografía, etc.; las licenciaturas tendrán un año de especialización y una formación transversal (conocimientos humanísticos, de gestión y de emprendimiento, segundo idioma, capacidad de gestionar la innovación y formación dirigida a la sensibilización de la cuestión de género); incorporación de las nuevas tecnologías en las Universidades; pretende también dotar al alumnado de más movilidad (se acabarán las convalidaciones entre países adscritos); y en definitiva un INCREMENTO DEL EMPLEO de los titulados ya que los alumnos estudiarán titulaciones ajustadas con sus futuras profesiones. ¿Nos vamos a permitir el lujo de desaprovechar esta oportunidad?
¿Cuándo se ha hablado de privatizaciones? ¿y de aumento del precio de las matrículas universitarias? Resultan increíbles las falsas acusaciones que se lanzan atrevidamente cuando el Gobierno de Zapatero ha aumentado el 45% el presupuesto de becas Séneca, ha multiplicado por 12 el presupuesto destinado a Becas Erasmus, ha creado nuevas becas para estudiar idiomas en el extranjero (que ya han disfrutado 100.000 alumnos) y han creado programas de préstamos a 0% de interés, entre 2004 y 2008. En Andalucía, el modelo de financiación triplica en una década el presupuesto que la Junta de Andalucía destina al sistema universitario, se han pasado de 21 alumnos por profesor (en el 2004) a 12 alumnos por profesor (en 2008), se han creado las Becas Talentia y el Programa C2A de “captación de talentos”…
Juzguen Uds. mismos.
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